El Taller
Creando comunidad.
Las artesanas que realizan las piezas son uno de los elementos primordiales en la cadena de operaciones. Es la sensibilidad de estas mujeres para crear, innovar y conciliar tradición y modernidad lo que da vida a cada uno de nuestros productos. Durante mucho tiempo la comunidad en la que se encuentra el taller , en especial las mujeres, se sintió atraída por el colorido y la fabricación a mano de nuestro trabajo. De manera natural se interesaron por ser parte de lo que ahí sucedía pero sus contextos y tareas cotidianas eran un obstáculo para muchas de ellas. Debido a esto decidimos proponer una estructura de trabajo en dos niveles: la producción dentro del taller y la producción externa. Lo que les permite permanecer en los espacios domésticos atendiendo sus responsabilidades familiares y al mismo tiempo ser agentes de una comunidad productiva que las empodera.
Por otro lado el proceso de trabajo dentro del taller les permite pasar por etapas en donde se familiarizan con la técnica y adquieren las habilidades y conocimientos para integra a las piezas sus propias ideas. Este proceso consta de tres fases, en la primera, las enrolladoras habilitan el material en rollo, en la segunda, las artesanas elaboran piezas utilitarias con funciones específicas, aún cuando siguen ciertos parámetros importantes para la calidad del trabajo, son ellas quienes se encargan del trabajo decorativo de las piezas. Finalmente, tenemos una tercer fase en la que las artesanas más experimentadas realizan piezas escultóricas que requieren un tiempo y procesos más extensos. En estas piezas el talento, experiencia y procesos creativos se conjuntan para crear piezas artísticas que son exhibidas en museos y galerías como un ejemplo excepcional del trabajo que realizamos. Ellas pertenecen a una colonia joven en la que la mayoría de la población se encuentra en un rango de edad entre 22 y 46 años. Nuestro taller, que se encuentra en esta colonia, funciona no solamente como un centro de producción sino como una red de apoyo social.
Es un espacio de encuentro y comunicación en la cual se crean lazos productivos que propicien el crecimiento individual y colectivo.
La dinámica de trabajo dentro del taller nos ha permitido crear una comunidad artesanal con una historia propia en la que un grupo de personas que habitan un mismo territorio en el que comparten costumbres y creencias, logran relaciones de amistad, ayuda y solidaridad.